L-CARTITINA 600 MG DIETMED
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CON CROMO
Nuestro organismo se encarga de sintetizar las grasas para poder obtener energía de ellas y llevar a cabo las actividades diarias. Dentro de la mitocondria celular se transforma esta grasa en energía.
Los ácidos grasos de cadenas cortas...
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Los ácidos grasos de cadenas cortas o medianas -ácido aceitico, ácido propiónico, ácido valérico, ácido butírico, etc.- atraviesan la membrana mitocondrial interna. Sin embargo, los ácidos grasos de cadena larga -ácido palmítico, ácido esteárico y ácido oleico- necesitan de la carnitina para poder traspasar esa membrana hacia el interior de la célula mitocondrial.
Cuando el organismo utiliza altas dosis de carnitina favorece la utilización de grasas para ser transformadas en energía en lugar de usar los azúcares. Este proceso provoca una pérdida de materia grasa en el cuerpo. A la vez que reduce la fatiga muscular y el tiempo de recuperación tras el ejercicio.
Ha demostrado ser muy eficaz en:
Enfermedades cardiovasculares: infarto agudo de miocardio, necrosis de miocardio, arritmias.
Enfermedades renales: trastornos hepáticos, cirrosis.
Enfermedades mentales: alzhéimer, depresión senil, falta de memoria relacionada con la edad.
Enfermedades metabólicas: diabetes, concentración elevada de colesterol relacionado con LDL, concentración elevada de triglicéridos.
Problemas dermatológicos: oxidación de la piel por envejecimiento, cicatrices y estrías.
La dosis diaria ingerida, para una persona sana, oscilan entre 500 miligramos y 2 gramos diarios.